EL VESTA:JOAQUIN SANCHIS NADAL, UN GRAN PERIODISTA QUE ENSALZÓ NUESTRA SEMANA SANTA

EL VESTA.-Hoy, no os voy a contar nada de mi cosecha, simplemente quiero que leais detenidamente lo que decía ese gran periodista que fue Joaquin Sanchis Nadal sobre nuestra Semana Santa, y de lo mucho que publicó he escogido lo que escribió en LA CORRESPONDENCIA DE VALENCIA EN 1930 año de nuestro primer entierro colectivo.Disfrutar.

"En la brillante trayectoria que desde hace algún tiempo viene recorriendo la Semana Santa del puerto, fiesta que es como la máxima exaltación del temperamento y del espíritu eminentemente artístico del pueblo valenciano, hemos de registrar un año más. Un año que, a un lado la importancia que pueda tener desde el punto de vista cronológico, adquiere una notoria trascendencia, porque con su fin cierra y abre, respectivamente, dos épocas felices en la historia de estos tradicionales festejos: la del resurgimiento y la su máximo esplendor y desarrollo. Nacidas estas fiestas en época remota, cuando el distrito marítimo no era más que un puñado de toscas cabañas que cara al mar, y teniendo a sus espaldas la huerta valenciana, recibía la carcia de todos los vientos, fueron evolucionando con un raro paralelismo al engrandecimiento de estos hoy populosos barrios, reflejando en su historia y en su organización todos los cambios y oscilaciones, tanto económicos como urbanos, que en aquellos se produjeron con el tiempo. Y de igual modo que el distrito marítimo se convirtió en el barrio que más honra a la ciudad, así las fiestas de Semana Santa fueron poco a poco adquiriendo importancia y belleza, hasta llegar a constituir el acontecimiento artístico más grande que da durante el año el pueblo valenciano, este prodigioso pueblo que se ha hecho célebre en el mundo por la magnificencia y grandiosidad que siempre dió a sus típicas fiestas y por el arte que derrochó con todas ellas. Por ello, pues, hoy que el distrito del Puerto ha comenzado a vivir ya su época de florecimiento, después de remontar el plano inidicado de las aspiraciones, la Semana Santa marítima entra también en su época de oro, finida que ha sido su larga era de gestación, en la que, todos los sinsabores y todos los trabajos tuvieron una manifestación palpable. Quien no conozca el proceso evolutivo de la Semana Santa Marítima, no puede formarse ni una ligera idea de los sacrificios que supone la organización de estas grandiosas manifestaciones religiosas y los desvelos y la actividad que implica la importancia adquirida por aquellas en los últimos años. Nosotros, que hemos seguido paso a paso el proceso de la creación de tales festejos, sabemos como pocos el inmenso valor que éstos tienen, ya que todo lo conseguido se debe unicamente al decidido empeño y al entusiasmo de los hijos de estas populosas barriadas marineras, hombres que sienten como pocos el amor debido a las tradiciones y a las costumbres de los mayores. Asimismo, en todo momento el espiritu elevado de esta raza, que se manifiesta en la atracción e influencia que siente por todo lo bello, ha estado presente, y ello, la inclinación a conservar las normas consuetudinarias y ese noble deseo de superarse, tan característico en las tres parroquias, que han sentido siempre los vecinos del Grao, Cabañal y Cañamelar han permitido que estas antiguas fiestas de Semana Santa, lejos de morir o de languidecer, hayan ido tomando incremento, hasta llegar a la elevada situación que en el orden de los prestigiosos han logrado alcanzar. Y todo esto, aspiraciones, proyectos, deseos de hacer algo grande y definitivo, ha logrado plasmarse en la más halagueña realidad en el presente año, en cuyo curso los festejos han quedado organizados en forma que no tienen nada que envidiar a los que mayor fama han alcanzado hasta la fecha. Después de lo dicho no es, pues, aventurado afirmar que la Semana Santa valenciana ha entrado ya en la época de su florecimiento, y que introduciendo en ella las mejoras que el tiempo y la práctica aconsejen, se convertirá dentro de poco en el acontecimiento de arte y de vistosidad más grande que se celebra en toda España durante el año".

Va bien la cosa, pues seguir leyendo.

"Para darse una perfecta idea del arraigo que estas grandiosas manifestaciones religiosas tienen en el distrito marítimo y conocer a fondo el espiritu que las animan es imprescindible hacer un poco de historia. El origen de estos actos se pierden en la lejanía de los tiempos... Durante siglos, los hombres del mar, cuya fe culminaba en la cruz de madera de su tosca barraca, en mística ofrenda al que rige los vientos y embravece las aguas, rendíanle ferviente tributo de amor y admiración en esta piadosa semana de dolor y de muerte. Sayones y granaderos, custodiando las veras efigies del Nazareno y de la Dolorosa, recorrían las calles que formaban por aquel entonces las humildes cabañas, para que el pueblo, puesto de hinojos, reverenciase al Hijo sangrante y a la Madre santa. Eran unas fiestas modestas, como el espiritu de los rudos marinos que las celebraban; pèro en ellas ponían tanta fe, tanto entusiasmo, hacían un tan gran alarde de imaginación y fantasía, que las severas ceremonias adquirían en algunos momentos caracteres de intenso realismo. Los grupos de sayones vestidos con los más caprichosos trajes, desfilaban por las empolvadas calles conduciendo al Cristo con un gesto feroz que sobrecogía el ánimo de los rapaces y hacía prorrumpir en exclamaciones de indignación a las piadosas viejucas. Ya en aquellas exhibiciones se dejaba entrever el arte del pueblo, plasmado en las vistosas dalmáticas y en los lucientes cascos; un arte sencillo y rudimentario si cabe, pero arte al fín, precursor del que hoy se hace gala en las grandes exhibiciones de Semana Santa. Durante aquellos días, los marineros dejaban sus lanchas descansando en el arenal inmenso de la playa, y ni uno sólo dejaba de sumarse a la piadosa fiesta. Grandes y chicos, animados de un mismo espíritu de exaltación mística, rememoraban la tragedia del divino Galileo con las ceremonias del encuentro, de los pasos, y finalmente con el entierro. Por las épocas en que España sufría el yugo de las huestes napoleónicas, el general que mandaba las fuerzas francesas destacadas frente al embarcadero del Cabañal, con objeto de captarse las simpatias de los pescadores, dispuso que una guardia de granaderos diese escolta a la Dolorosa en la procesión de Viernes Santo, y desde entonces los "festeros", hallando en el vistoso traje del guerrero francés un excelente medio de dar rienda suelta a su exuberante imaginación, crearon las Corporaciones de granaderos, que todavía perduran, como la de los sayones, no menos llamativa y pintoresca, haciendo honor a la tradición y a la iniciativa de nuestros antepasados. Todas estas costumbres, todas estas manifestaciones del temperamento artístico de nuestro pueblo, han permanecido intangibles durante el transcurso de los años, habiendo llegado íntegras en espíritu hasta nosotros, aunque un tanto modificadas en la forma, por las exigencias del medio y del ambiente moderno en que en la actualidad se desenvuelven."

Y ahora explica que su fama se ha difundido por toda España.

"En la información análoga a ésta que publicamos el año último por idéntica fecha, deciamos que no obstante la magnificiencia de estos festejos, la Semana Santa valenciana era poco conocida. Hoy no podemos decir de ella lo que escribimos en nuestro anterior reportaje. Ya durante los dos años últimos, que aparecieron a la luz los primeros folletos de propaganda y que se crearon varias de las nuevas Cofradías de Nazarenos que existen en la actualidad, la justa nombradía de las castizas fiestas religiosas de las barriadas marineras se había extendido considerablemente. Pero el exito rotundo, definitivo, alcanzado por aquellos en el año último, hizo correr su fama por toda España, como reguero de pólvora, y atrajo sobre las mismas la atención de millares de personas. De los puntos mas distantes y hasta de numerosos pueblos extranjeros, se han estado pidiendo todo el año informes y noticias relacionadas con la Semana Santa valenciana. La Sociedad Valenciana Fomento del Turismo, que desde su revista "Valencia Atracción" ha venido haciendo durante mucho tiempo una activa propaganda, ha recibido varios centenares de cartas de Francia, Inglaterra, Alemania y América, demandando folletos, programas y cuantos datos pudiese facilitar sobre nuestras admirables fiestas de Semana Santa, así como el Comité Central de Fiestas, máxima autoridad directora de estas manifestaciones artísticas, que ha sido solicitado repetidas veces desde diversos puntos para que facilitase datos relacionados con su organización. En los pueblos de la región valenciana, la expectación y la curiosidad es enorme, siendo muy pocos los que no se han prometido trasladarse a Valencia durante los días de fiestas, para presenciar el brillante desfile de las Cofradías y las magníficas procesiones. Las Compañias de Ferrrocarriles han concedido rebaja en el precio de los billetes, y las empresas de autobuses están organizando caravanas y viajes especiales desde todos los pueblos de la región. Esto, unido al entusiasmo reinante en la capital, hace presagiar una afluencia de gente no conocida hasta hoy y quizá mayor que la que origina la fiesta de las fallas." ¿Causas de esta rápida conquista del interés público? La magnificiencia y el esplendor de que se hace gala en estas fiestas, el espectáculo deslumbrador y altamente espectacular que ofrecen y el derroche de arte, de riqueza y de magnificencia que se llevó a cabo en estas nunca bien ponderadas fiestas de Semana Santa, distintas en un todo a las que que se celebran en otros puntos de España. Nuestra Semana Santa no es copia de ninguna otra ni se asemeja en lo más mínimo a las famosas de Sevilla, Málaga y otros puntos de Andalucia. La Semana Santa de Valencia es "sui generis", caracteristica de este pueblo. Tanto en su organización como en su historia y en su desenvolvimiento no tiene ningún punto de contacto con las mencionadas. Cuanto en ella se hace, cuanto en ella se exhibe es producto de la imaginación de este pueblo, que concibe como nadie la idea de estética y de la belleza. Por ello, pues, porque es original y tiene en principio el mérito de lo que es único y exclusivo, poque ha nacido en una tierra en donde encuentra asiento toda manifestación de arte y porque es llevada a cabo por unos hombres amantes de la tradición y consecuentes con sus ideas y convicciones, dotes éstas que les hace llevar a cabo las más dificiles empresas, es por lo que la Semana Santa del distrito del Puerto, en unos pocos años ha logrado ocupar un puesto preeminentisimo entre cuantas fiestas de esta naturaleza se celebran en España, atrayendo para sí la expectación y el interés de todo un pueblo. El alma de la fiesta Es innegable que en el mundo todo lo que vive tiene un cierta palpitación espiritual que contribuye a formar su fisonomia psicologica y peculiar, algo inmaterial y transparente que da energia y calor, que pone un soplo de vida en la materia o en el organismo inerte: el Alma. Por ello, estas nuestras grandiosas fiestas de Semana Santa, obra de seres que viven en estrecha comunión ideológica; resultante del latido sincrónico de miles de corazones que palpitan con un mismo ritmo, han de tener también su alma, han de vivir a impulsos de esa energia vital que es intangible y clara como la luz y que puede considerarse como el principio y fin de todas las cosas. Un alma fuerte y poderosa, pero exquisita y sensible como un delicado perfume de flor y capaz de adaptarse a todos los medios cual una fina hoja de oro maleable. Alma fuerte y poderosa, porque está avezada a la lucha y al rudo trabajo de estos hombres; sensible y delicada, porque se educó frente al mar y mirando al cielo, y dotada de una notable facilidad de adaptación, porque abierta a las cuatro orientaciones ha recogido todas las influencias espirituales que sobre nuestra raza ejercieran los pueblos más diversos. Pero ese latido, esa vibración que origina el alma de la fiesta procede del espiritu de nuestro pueblo, que no es sino lo que hemos mencionado más arriba : mezcla de poder, de sensibilidad psiquica, de delicadeza sensitiva, de ductibilidad. Y por ello el alma de la fiesta es el espiritu mismo de la raza, de nuestra raza noble y privilegiada, y por ello también tiene aquella toda la espontaneidad y belleza, toda la simpatia de lo que nace al calor del ambiente popular. Por ello, pues, si el alma de la fiesta es el espiritu mismo del pueblo, mientras aliente un solo levantino, mientras quede en el barrio marítimo un solo hombre que sepa mantener siempre el fuego sagrado de la tradición y de la costumbre, mientras quede, en suma, un pequeño vestigio de este nuestro admirable espíritu de raza, las fiestas de Semana Santa se repetirán un año, otro año, aumentando en grandiosidad espectacular y en magnificiencia, como un canto a nuestra fantasía y a nuestra devoción por la estética y por la belleza. La organización de las fiestas Un espectaculo tan soberbio como es la Semana Santa del puerto requiere una organización concienzuda y amplisima. Las numerosas Hermandades que en ella toman parte, la variedad de actos que se realizan, las ceremonias, los desfiles y oros tantos alicientes de tales fiestas requieren una intensa labor preliminar que se realiza en el transcurso del año. Cada Cofradía tiene su junta de gobierno, que entiende en todos los asuntos de régimen interno de las mismas, hallándose agrupadas las correspondientes a cada una de las parroquias del Grao, Cañamelar y Cabañal en torno de sus respectivos Comités de Parroquia, organismos que resuelven todos los asuntos concernientes a su demarcación y toman parte en las cuestiones que pueden afectar en conjunto a sus Cofradías. La Labor de las directivas de las Hermandades y Corporaciones de los tres Comités de Parroquia es por demás interesante y eficaz, ya que de su actuación depende el resultado final de los festejos; pero de donde dimana la organización conjunta de todos cuantos toman parte en la fiesta y de donde salen resueltos ya todos cuantos proyectos o iniciativas tienen las Hermandades es el Comité Central, la máxima autoridad en materia de fiestas y el firme puntal en que ha comenzado a apoyarse el complicado tinglado de la Semana Santa. La labor organizadora, administrativa y conciliadora llevada a cabo por este organismo, en los tres años que lleva de existencia, quizá haya sido la base del rápido incremento tomado en tan corto espacio de tiempo por estos típicos festejos, que arrastraban hace tan sólo un lustro una vida lánguida y decadente. Este año el Comité Central, continuando su obra propugnadora, ha batido el record de organización. A su feliz gestión se debe el aumento de las subvenciones que desde hace dos años dan el ayuntamiento y la Compañia de Tranvias y el logro de una serie de privilegios y prerrogativas de que antes se carecía. Asimismo ha resuelto el problema de las procesiones de Viernes Santi, instituyendo el Entierro único, soberbio acto que será como el digno e indispensable colofón de las magnificicas exhibiciones que se harán durante toda la Semana Santa, y otras modificaciones y novedades que daremos a conocer al lector en el curso de esta información. Los miembros de este Comité y muy especialmente su digno y prestigioso presidente don Antonio Bellmont, han puesto de relieve lo que se puede hacer en beneficio de nuestras fiestas, cuando a su servicio se pone el entusiasmo y el cariño que ellos han desplegado durante todo el año. Fuera olvido imperdonable no consignar quí sus nombres, y por ello lo estampamos gustosísimos, como modesto homenaje a su magna y acertada labor. Comite Central de Fiestas de Semana Santa del distrito del Puerto (Valencia) Presidente, don Antonio Bellmont. Vicepresidente, don Vicente Cuenca. Secretario general, don Eduardo Estellés. Secretario, don Abelardo García Crespo. Tesorero, don José Ferrriols Casanova. Contador, don Salvador Barber. Vocales: don Vicente Ibañez, don José Boira, don Rafael Roig y don José Serra. Las hermandades A veinte ascienden este año el número de Hermandades y Corporaciones que toman parte en las solemnes fiestas de Semana Santa del distrito del Puerto, número que dificilmente podrá ser superado en otros puntos donde constituyen estos festejos un acontecimiento. Pero son veinte Hermandades verdad, nutridas con un crecido contingente de cofrades, que en algunas pasa de cien, todos afectivos y animados del mismo entusiasmo y cariño por la fiesta. En todas ellas se nota un creciente ansia de superarse, sentimiento que lejos de suscitar odiosas rivalidades despierta un gran estímulo entre los componentes de las Cofradías, que se traduce después en mejoras y beneficios para la fiesta. Los componentes de estas Hermandades, más las bandas de música que acompañan a cada una de ellas, suman un total de 3.500 hombres, los cuales toman parte en los desfiles y procesiones que por espacio de ocho días se celebran en las amplias calles de las barriadas marítimas, ya bajo la luz cegadora de nuestro esplendente sol levantino, ya en la oscuridad de la noche, entre el fulgor rojizo de las hachas de viento y de los cirios.

Nada tan soberbiamente magnífico como estos desfiles. A la luz del día el brillar de espadas y cascos pone centelleos chispeantes en el ambiente, y el oro y la seda de los trajes parece que se deshacen en cataratas de color. De noche, los nazarenos, graves, silenciosos, con sus severos y fantasmales ropajes, llenan los espíritus de una vaga inquetud, aumentada más y más por el sordo redoblar de los roncos atabales. Y todo esto, pagano o religioso, alegre o triste, discurre por las calles rectas, amplias magníficas, del distrito marítimo, sin que jamás se dé la nora discordante o grotesca que es frecuente en otros puntos, donde la Semana Santa vive por la fuerza de la tradición y por la conveniencia de una buena corriente de turismo, sin que en ella entre en lo más mínimo el amor y el espiíritu del pueblo. (1.-)LA REAL HERMANDAD DE LA SANTA FAZ Al hacer la descripción de las Hermandades que toman parte en la Semana Santa marítima, es indispensable comenzar por la Real Hermandad de la Santa Faz, no porque en el orden de nuestros sinceros afectos guarde un lugar presferente, que a todas cuantas toman parte en las fiestas y laboran por su engrandecimiento, profesamos idéntica devoción, sino porque correspondiente a ella el honor de haber dado la pauta a seguir para el resurgimiento de las fiestas, fuera ingrato no colocarla abriendo marcha en esta información, como antaño se colocó ella misma a la cabeza de nuestras languidecientes fiestas de Semana Santa, logrando con su bello gesto de amor al fuego sagrado de la tradición, que lo que era caida y derrota se convirtiese en primaveral resurgir de ideales dormidos y de costumbres olvidadas. Por ello, a un lado las circunstancias especiales en que se desenvuelve y su organización modelo, que ya de por sí la colocan en el lugar preeminente que en la actualidad ocupa, nosotros vemos a la Real Hermandad de la Santa Faz prestigiada con el mérito de haber dejado sentado un valioso precedente, que secundado y aún aumentado por las otras Hermandades, ha dado los positivos resultados que todos podemos admirar. Sirvan, pues, estas líneas preliminares como el testimonio de nuestro sincero aplauso por la beneficiosa influencia que su aparición ejercició sobre las fiestas, impidiendo la caida de aquellas y contribuyendo a su resurgimiento. Esta Hermandad fue fundada con carácter particular el 6 de mayo de 1924, e hizo su aparición en las festividades del año siguiente. Fue un exito rotundo y la nota culminante de aquel año. Con sus vestiduras y su original presentación, dió a nuestra Semana Santa un aspecto nuevo, que le prestaba inusitada brillantez. En 1927 quedó constituida oficialmente, siendo honrada poco después con el título de Real Hermandad, por el Monarca, a quien le fue conferido el título de Hermano Mayor honorario. Los demás cargos están distribuidos del siguiente modo: Primer presidente honorario, don Manuel Garcia Dutrús; primer hermano mayor (honorario), don José Juan dómine, presidente efectivo, don Antonio Bellmont, vice(presidente), don Vicente Gallart; secretario general, don Francisco Alarcó; secretario de actas, don Abelardo Ibor; vicesecretario, don Aurelio Blasco; tesorero, don Indalecio Soler; juez-contador, don José Torres; Hermano mayor, don Emilio Laureano; Hermano prioste, don arturo alarcó; vocal censor, don Vicente Soriano; vocal asesor, don José Lacomba; vocal cronista, don Rafael Morales; y vocales: don Vicente Miquel, don Amadeo Fos, don Antonio Montoro, don Enrique Goda, don Ramón Torres, don Manuel Belenguer, don Antonio Cubells, y don B.Roda Cuenta esta Hermandad con 50 Hermanos penitentes y más de 200 socios protectores, estando desempeñados sus personajes bíblicos, por las bellas señoritas Conchita y amparín Albors y serrano, que representan a la Verónica y a la Dolorosa, respectivamente, y por la monísima niña Marujín alarcó, que interpreta la Fe. Viste la Real Hermandad de la Santa Faz, rica túnica de terciopelo morado y caperuza blanca de seda, con el bordado en colores de la efigie titular, luciendo en la manga del traje, bordadas en oro fino, lass iniciales de la Hermandad, rematadas por una corona real. Ciñe la túnica un valioso cordón de plata y seda. La banda que acompañará en los desfiles a esta Hermandad, es la laureada y prestigiosa del Patronato Musical, compuesta de 70 profesores y dirigida por el notable maestro don Vicente Tomás. Llevará también la banda de trompetas del regimiento de Guadalajara, que ha sido cedida gentilmente por el capitán general. LA IMAGEN La imagen de esta Real Hermandad es el magnífico trono-anda titulado "Paso de la Verónica", obra del joven y notable escultor Manuel Silvestre. El realismo de las figuras y su acertada disposición hacen de este grupo escultórico un verdadero monumento artístico que enriquece notablemente la imagineria de la Semana Santa valenciana. (2.-)HERMANDAD DEL CRISTO DE SAN SALVADOR Esta Hermandad es la más antigua de las existentes en el distrito marítimo, y una de las que más fervor despierta en el pueblo. Es la Cofradía de los marineros, y en torno a ella se agrupan todos cuantos ganan el pan luchando con el mar. Es la Hermandad de más histórica tradición. Fundada a principios del siglo XIX, ha venido transmitiéndose de padres a hijos, como algo sagrado, como algo eterno e imperecedero que fuese ligado a sus vidas mismas. La imagen titular de esta Cofradía, es una hermosa talla del siglo XVIII, de mérito innegable. Figura como presidente y Hermano Mayor, don Juan Bautista Ferrer, ocupando los demás cargos don Miguel Canós, teniente Hermano Mayor; don ramón Blasco, secretario; don Vicente Traver, tesorero, y don Severino senent, juez contador. amenizan los desfiles de esta Hermandad, las bandas Parroquial de Valencia y artística de Benisanó. Su personaje bíblico, el Niño Jesús, está representado por la niña Paquita Andivert. (3.-)REAL HERMANDAD DE LA FLAGELACION DEL SEÑOR No obstante ser de reciente fundación esta Hermandad, es la más numerosa de cuantas figuran en la Semana Santa marítima, y por ende, una de las más destacadas e importantes. Cuenta con más de 100 Hermanos penitentes y con gran número de socios protectores. El traje vestido por esta Hermandad consiste en una bella túnica de terciopelo rojo, caperuza del mismo color y capa blanca de seda. Los cargos de la Cofradía son los siguientes: Presidente y Hermano mayor, don José Ferriols Casanova; teniente Hermano Mayor, don Manuel Ruiz; secretario, D.Eduardo Estellés; tesorero, don Isidro García. Como Hermano mayor honorario figura su Majestad el Rey, a quien se le ha dedicado un artístico pergamino con el nombramiento. Lleva en las procesiones y desfiles como personajes bíblicos, a las tres Marías, que están representadas con gran justeza por las bellas señoritas Gloria Hueso, Conchita Cavedo Carsí e Isabelín Vicent Rizo. El estandarte de esta Hermandad es también una valiosa obra de arte, bordada en seda y metales preciosos. LA IMAGEN La Real Hermandad de la Flagelación ha encargado al escultor Arnal, joven artista que va a pasos agigantados hacia el pináculo de la fama, un magnífico trono-anda que será inaugurado este año. Consta aquél de cinco figuras, maravillosamente ejecutadas, que van dispuestas en grupo distribuído con mano maestra sobre una artística peana, en la que el estilo renacentista se ha hermanado hábilmente con ornamentaciones barrocas de una prodigiosa ejecución. El Cristo es la realidad misma hecha escultura. En sus facciones se acusan plenamente el dolor y la resignación, y todo el cuerpo parece estremecido por un profundo dolor. Las demás figuras, cuya glosa nos es imposible hacer por falta de tiempo y de espacio, están ejecutadas con el mismo arte que la del Cristo azotado, constituyendo una plena manifestación del temperamento artístico del escultor José Arnal. (4.-)PONTIFICIA Y REAL HERMANDAD DE LA CONCORDIA Como la anterior, pertenece esta Hermandad a la parroquia del Grao, y ocupa también un lugar preeminente en el orden de los prestigios de nuestra Semana santa. Su habito es morado, así como la caperuza y la capa, todo de excelente terciopelo, con vueltas blancas. Ocupa el cargo de presidente honorario, don Leopoldo Aguirre, y el de Hermano mayor, también honorario, don Manuel Espinosa. Ostentan los cargos efectivos, don Miguel Montoro Carles, Hermano Mayor, teniente Hermano Mayor, don Gabriel Vignes; don José Boira, mayordomo, y don José sansabas, secretario. Tiene la citada agrupación un valioso estandarte, pintado por el notable artista señor Seguer, y otro que ha sido bordado por las Madres Franciscanas, del Grao, y que constituye una valiosa obra de arte. Cuenta la Hermandad con 50 cofrades y gran número de socios protectores. Su aparición ha dado un gran impulso a las fiestas, especialmente a las que se celebran en la parroquia del Grao. (5.-)HERMANDAD DEL ECCE-HOMO Esta Hermandad pertenece a la parroquia del Cabañal y es una de las más numerosas. Ostenta el día de Viernes Santo caperuza y capa morada, y el día de Pascua, las mismas vestiduras pero con capa blanca de seda. El estandarte de esta Cofradía está valuado en 4.000 pesetas, y consiste en un bello marco de metal repujado que contiene una bella pintura del Ecce-Homo. Es presidente y teniente Hermano Mayor, don Luis Gallart, ocupando los restantes cargos: Don José Serra, Hermano Mayor; don Mariano serra, vicepresidente; don Joaquín Barberá, secretario; don José Castro, tesorero, y don Francisco Rocafull, contador. La imagen de la Cofradía es la titular de la parroquia. (6.-)HERMANDAD DE JESUS EN LA COLUMNA Esta agrupación, organizada hace tres años por una de las peñas artísticas de los poblados marítimos, es una de las Cofradías aparecidas al iniciarse el resurgimiento de estos típicos festejos. La imagen de la Hermandad, propiedad de la misma, es un bello grupo escultórico del notable artista Tomás Noguera. Cuenta la Cofradía con más de 49 Hermanos penitentes y gran número de socios protectores. Es presidente y Hermano Mayor don Pedro Castellano, gran entusiasta de las fiestas; secretario, don Manuel Barberá Furió y tesorero, don Vicente Segrera. Sus personajes bíblicos, el Cristianismo y Marta, son representados, respectivamente, por las señoritas Consuelito Martínez y Maruja Sebastiá. Viste esta Hermandad túnica azul y capa y caperuza oro, los días santos, y el mismo indumento, pero con capa blanca, el domingo de Resurrección. Luce un soberbio estandarte bordado, verdadera joya artística, y es acompañada en los desfiles por una brillante banda de música. (7.-)HERMANDAD DEL CRISTO DEL BUEN ACIERTO Esta típica y antigua Hermandad data desde el año 1814, época en que fue fundada por un grupo de fieles pertenecientes a la entonces ermita del Cañamelar. Consta de gran número de hermanos penitentes, estando representados sus personajes bíblicos por las señoritas Pepita Ahumada, que representa a María Magdalena, y Vicentita estellés, que simboliza a la célebre Marta. Es hermano mayor de la Cofradía don Juan Pascual, y son presidente y secretario de la misma don Vicente Vives y don Tomás Miquel, respectivamente. El traje consiste en túnica y caperuza negra con vivos morados y capa morada. A esta Hermandad se la conoce vulgarmente con el nombre de "vestas del Cañamelar". (8.-)HERMANDAD DEL CRISTO DEL PERDON Esta Cofradía es la más numerosa de las que salen en la parroquia del Cañamelar (debe decir Cabañal, tambien se equivocan, en aquella época). Cuenta con más de 70 Hermanos, que visten con gran propiedad. Su túnica es blanca de seda, con capa y caperuza color magenta, del mismo tejido, para los días de Jueves y Viernes Santo, y traje blanco para el día de la Resurrección. Es Hermano mayor de la Cofradía don aflredo Cot, y como presidente don Ramón Fos, y como secretario y tesorero, respectivamente, don arturo Matoses y don Pascual Benedito. Su personaje bíblico, el Niño, está representado por la niña Maruja Carabal. La imagen de esta Cofradía pertenece a doña Josefa Alpera, y es una talla en madera, obra del escultor señor Rodriguez. En los desfiles será acompañada por la banda de Benisanó. (9.-)HERMANDAD DE LA CRUCIFIXION Desprovista de historia esta Hermandad por su reciente advenimiento al seno de la fiesta, llega en cambio provista de un nutrido bagaje de entusiasmos y anhelos, cristalizados ya el año último en el momento mismo de su aparición, y que han continuado desenvolviéndose en el transcurso de su corta vida para bien de la fiesta y de la justa fama de que hoy gozan ya estas notabilísimas solemnidades de Semana Santa. Luce severas y valiosas vestiduras, acreditativas de un exquisito y depurado sentido artístico; es poseedora de un bellísimo estandarte, notable obra maestra de repujado y pintura, y cuenta entre sus ya numerosos cofrades con gran número de Hermanos pertenecientes a distinguidas familias valencianas, destalle este último de singular importancia y trascendencia, ya que con ello se pone de manifiesto que su labor, traspasando los límites del distrito, ha llegado hasta la ciudad dormida que es Valencia para todo lo que afecte a este distrito, y haciéndola salir de su contumaz indiferencia la ha obligado a volver sus ojos hacia aquí y ha obtenido de ella quizá lo más dificil: su ayuda personal. Es presidente de la Hermandad don Juan feo Pérez, ocupando los demás cargos los señores siguientes: Hermano mayor, don Salvador Giner; vicepresidente, don Francisco Gómez; tesorero, don Antonio Guinart; contador, don Rafael Roig, y secretario don Vicente Bernabeu. (10.-)HERMANDAD DEL CRISTO DE LOS AFLIGIDOS En torno de la antiquisima y venerada imagen de este nombre, que desde tiempo inmemorial se venera en la parroquia del Cañamelar, se constituyó el año pasado esta nueva Hermandad. Cuenta la leyenda que la imagen fue regalada a la entonces ermita del Cañamelar por los condes de Albalat, en virtud del milagro obrado por el Cristo de pedir su traslado a la citada pequeña iglesia. La imagen es una hermosa talla del siglo XVI, de autor desconocido, que ha estado desde el año 1885 sin salir de la iglesia. Para los diversos actos de la fiesta, la Hermandad ha encargado al notable artista Carmelo Vicent una reproducción de la imagen, escultura que ha sido realizada con sin igual perfección por el expresado joven maestro. Es Hermano mayor don Abelardo García Crespo; presidente, don Abelardo García Belenguer; secretario, don José Ferrando, y tesorero, don Eduardo Gallart. Su personaje bíblico, Claudia Prócula, está fielmente representado por la encantadora señorita Maruja Rams. Acompaña a la Hermandad la banda de música de Sedaví. (11.-)HERMANDAD DEL SANTO SILENCIO Otra importante Cofradía del Cabañal es la del Santo Silencio, que tiene por imagen el hermoso sepulcro de esta parroquia, una de las más bellas obras de arte que se exhiben en la Semana Santa. Alrededor de 50 Hermanos figuran en el censo de esta Cofradía, y todos ellos visten con gran propiedad rica túnica blanca, con capa y caperuza de color azul, en la que campea un artístico bordado de Cristo en la agonía. Es presidente y Hermano Mayor de la Cofradía, don Vicente Botella; secretario, don Francisco Bañuls, y tesorero, don felix Belenguer. Sus personajes bíblicos son la Verónica y la Fe, que están desempeñados por las señoritas Bienvenida Martí y Amparín Rocafull. Ameniza los actos de esta Hermandad la banda de Alfafar-Benetuser. (12.-)HERMANDAD DEL SANTO SEPULCRO Otra interesante Hermandad, joven como casi todas las anteriores, es la del Santo Sepulcro, perteneciente a la parroquia del Cañamelar. Los días santos luce capa violeta y túnica blanca, y el domingo de Pascua túnica otomán seda y capa damasco, color blanco hueso. El estandarte de esta Hermandad es una notable obra de arte. Aparte del trabajo pictórico, que posee un gran valor artístico, el remate, reproducción en bronce repujado del Santo Sepulcro, es una labor de indiscutible mérito. Es Hermano mayor y presidente de esta Hermandad, don Alberto Rams. (13.-)HERMANDAD DE LA ORACION EN EL HUERTO Esta Hermandad es de reciente fundación y aparece este año por primera vez. Es digno de todo aplauso su bello gesto, pues con su salida viene a contribuir al impulso tomado por las fiestas. No obstante ser el primer año de su aparición, cuenta con numerosos cofrades, los cuales, los cuales visten preciosa túnica de seda blanca, rica capa morada y capirote del mismo color. En la parte delantera inferior de la caperuza, llevan los cofrades bordado en oro un artístico cáliz. Los organizadores de la nueva Hermandad son los señores siguientes: Don Francisco albert, presidente; don Francisco Ceballos, secretario; don Lorenzo Dasí, tesorero y Hermano Mayor. Su personaje bíblico, Rebeca, está a cargo de la señorita Rosarito Burgals.

(14 a 19.-)LOS SAYONES Y GRANADEROS

Las corporaciones de Sayones y Granaderos, que figuran en las procesiones de las tres parroquias del Cabañal, Cañamelar y Grao, son las más típicas y tradicionales de cuantas existen en los poblados marítimos. Son representantes de los (14.-)Sayones del Cabañal don Vicente Cuenca y don José Gans, y de los (15.-)Granaderos (del Cabañal), don Vicente Estrela y don Francisco Mirapeix. El personaje bíblico de los Sayones está representado por la señorita María Valero, y el de los granaderos, por la señorita Vicentita Estrela. La primera corporación lleva consigo la banda de la Vega, y la segunda la de Bomberos. Los (16.-)Sayones del Grao están regidos por la siguiente junta: Presidente, don Felipe Dómine; secretario, don Miguel Sebastiá; tesorero, don José Montañana y contador, don Juan Sanchis. El personaje bíblico de esta corporación, la Samaritana, está representada por la señorita Pepita Burgal. Los (17.-)Granaderos (del Grao) de esta misma parroquia están regidos por don Rafael Navarro, presidente; don Ramón Dolz, vice(presidente); don Manuel llorca, secretario ; don José María López, tesorero, y don José Sanhis, contador. Representan los papeles de los personajes bíblicos las señoritas Amparito Carbonell y Marujita González. De intento hemos dejado para el final las Corporaciones de (18.-)Sayones y (19.-)Granaderos del Cañamelar, con objeto de ocuparnos nun poco más detenidamente de ellas, y particularmente de la hermosa imagen de la segunda. La directiva de los sayones la constituyen don Alberto Soler, presidente; don Antonio, contador, y don José Maria Garriga, capitán. Sus personajes bíblicos, las Samaritanas, están representados por las bellas señoritas Rosita Llopis Bañon y Amparín Catalá Pallás. La Corporación de granaderos tiene constituida su directiva del siguiente modo: Don Francisco Carabal, presidente; don Rafael Felix, vice(presidente); don Nicolás Martínez, secretario, y don Francisco Vives, tesorero. Su único personaje bíblico, Santa María Magdalena, está admirablemente interpretado por la encantadora señorita Encarnación Ibañez, que luce una magnífica y valiosa vestidura de la época. Esta Corporación estrenó el año último uniformes y armamento que llamaron poderosamente la atención; pero con lo que dió la nota vibrante y definitiva fue con la presentación de su magnífico trono-anda de la Dolorosa, notable obra de arte que fue el "clou" de la fiesta de aquel año. Acompaña en sus desfiles a esta Corporación la condecorada y laureada banda Unión Musical de Valencia, dirigida por don Baldomero Roig. (20.-)CORPORACION DE SOLDADOS ROMANOS. Con una breve nota sobre esta interesante agrupación vamos a cerrar esta especie de historia cronológica de las Hermandades y Corporaciones que figuran en la Semana Santa del distrito del Puerto. Son quizá los soldados romanos los que visten con más propiedad, considerando su indumento desde el punto de vista histórico. Fue fundada la Corporación hace varios años, si bien no ha figurado en las fiestas en todos ellos. Con el presente reaparece de nuevo, poniendo una alegre nota de color en el conjunto final de la Semana Santa. Su presidente es don Vicente Martín, ocupando los restantes cargos don Bautista Martín, secretario, y don Jaime Benedito, tesorero. Su personaje bíblico, la Samaritana está representado por la señorita Paquita Nando. Es acompañada esta Corporación por la banda de la Unión de Pescadores. EL ENTIERRO UNICO Este año ofrecen las fiestas de Semana Santa un nuevo y magnífico aliciente. Las tres parroquias se han unido para realizar conjuntamente el solemne acto del Entierro. En esta colosal procesión figurarán las veinte Hermandades y Corporaciones con sus imágenes y sus bandas de música. Calculamos que desfilarán unos 3.500 hombres. El acto promete ser algo definitivo y nunca visto, que, como el desfile general que se lleva acabo el Domingo de Pascua, constituirá un verdadero acontecimiento. PALCOS Y TRIBUNAS Con objeto de que el público pueda presenciar cómodamente el paso del Entierro único y del desfile general, el Comité Central de Fiestas ha acordado la instalación de tribunas y palcos a lo largo de la calle de Capdepón. Estos palcos y tribunas se instalarán entre el arroyo y las aceras, con los que éstas aquedarán completamente libres, al objeto de que el público y los vecinos puedan circular libremente y presenciar con toda comodidad el espectáculo. ENVIO Al Comité Central de Fiestas de Semana Santa, y muy especialmente a su digno presidente don Antonio Bellmont, alma y espíritu animador de cuanto constituye un avance en la organización de nuestras fiestas, el tributo de estas modestas cuartillas y el más sincero aplauso por su intensa labor. Afectuosamente

Joaquin Sanchis Nadal.

Que cada cual extraiga sus propias conclusiones, yo opino que con una crónica así conocemos más lo que hacian nuestros antecesores. ENHORABUENA , ESTOY ORGULLOSO DE SER SEMANASANTERO.