
Nuestro Canyamelar que durante todo el Año duerme su sueño, sumergido en esa nebulosa histórica, despierta y se echa a la calle para revivir algo de su más intima esencia.
Nuevamente podremos ver la brillante celebración de la Semana de Pasión, de nuestra muy querida Semana Santa. Nuevamente sonarán esas Marchas, unas Fúnebres, las del Santo Entierro, pero otras Alegres, las del Apoteósico Desfile de Resurrección. Jesús no ha muerto, de nuevo estará entre todos nosotros.
Alegraos.”

La parroquial tuvo la siguiente composición. El Rvdo. don Alberto Villalba Navasquillo como párroco y asesor religioso, Pepe Vilaseca como vicepresidente, Vicente Andrés Celma secretario, Angel Méndez vicesecretario, el tesorero era Manuel Francisco Pradas, como delegados de festejos los Afligidos Sancho y Furió, Toni Peris el orfebre penitente de Pretorianos y un servidor, Paco Celdrán del Buen Acierto.
Como vocales los también Pretorianos Luis Pizá Antoni y Guillermo Rodríguez Miravet, Paquito Peiró del Buen Acierto, Tomás Peris Montaña del Descendimiento, Paco Celda Renau de los Granaderos y Salvador Edo Más, presidente de los Afligidos, y que cariñosamente le llamábamos el TIO BORO.
Esa Semana Santa de 1987 que para mí fue muy especial, y en otro relato de RECUERDOS entenderán porqué; la Hermandad del Santo Sepulcro añadió un nuevo acto, efectuando el traslado de su imagen titular el Cristo Yacente, que esculpieran en los talleres de Inocencio Cuesta, al local social que entonces estaba en la calle Padre Luis Navarro con la travesía de Justo Vilar. Durante todo el Sábado Santo permanecería en exposición y custodia para poder ser visitado por los feligreses hasta las diez y media de la noche, para desde allí devolverlo en emotiva procesión con antorchas.

Aún recuerdo, que destrozados tras la procesión del Santo Entierro varios cofrades y un personaje bíblico que representaba a Marta y que encarnaba Toñi Sanchis, acudimos a ese emotivo traslado pues en aquellos años gracias a Vicente Aparicio, Hermano Mayor, Manuel Miguel, presidente de la Hermandad y Loli su esposa, al igual que después con Chus Giménez tuvimos una intensa relación de amistad que aún hoy perdura, aunque no nos veamos tanto; y que nos llevó durante muchos años a participar en aquellos traslados del Cristo Yacente a la parroquia incluso con nuestra Hermandad al completo.

En esa Delegación de Festejos organizamos desde el



Seguro que muchos de ustedes pensarán, ya le ha salido la vena granota. Pero es que fue así. Además en el mundo ocurrieron muchas más cosas. Ese mismo año el 15 de abril, y con gran sorpresa, Estados Unidos ataca a Libia, aviones norteamericanos bombardearon en la madrugada las ciudades de Trípoli y Bengasi y causaron 40 muertos, entre ellos un ahijado de Gadafi. También fue noticia que 72 segundos después de su lanzamiento, la nave espacial “Challenger” explosiona en el aire y se desintegra; murieron los siete tripulantes.

A nivel nacional como en enero de ese 1986 nos habíamos incorporado a la C.E.E. comenzaba a traer de cabeza a muchos españoles un nuevo impuesto llamado IVA, Manuel Francisco de los Granaderos, seguro que lo vio en positivo, pues de eso sabe un rato. Como recogía LAS PROVINCIAS de aquel año, en referéndum decidimos los españoles que permanecíamos en la OTAN. El 52 % votó a favor y el 40% en contra. El sí a la OTAN fue logrado a pulso por el propio Gobierno que se volcó a favor de esta postura. Felipe González, cuatro años antes, cuando ganó las elecciones de 1982, se había mostrado contrario a la permanencia de nuestro país en la Organización del Tratado del Atlántico Norte, pero los años te cambian la opinión. A pesar de ello, el PSOE volvía a ganar las elecciones legislativas. Al mes siguiente, tragedia: 13 guardias civiles resultaron muertos y 40 heridos, tras el atentado de ETA contra un autobús en Madrid.; un Madrid de luto, por la barbarie terrorista y por el fallecimiento de su alcalde, el profesor don Enrique Tierno Galván. También supimos ese año que Barcelona era la elegida para organizar los Juegos Olímpicos de 1992.

1987 en nuestra Comunidad Valenciana también fue trágico. Nueve muertos y cien mil millones de pesetas en pérdidas fue el nefasto resultado de las inundaciones. La comarca de la Ribera fue la más afectada, aunque también la Safor, la Marina y la Vega Baja sufrieron los daños de las aguas. Los resultados de las elecciones autonómicas y municipales celebradas el 10 de junio, nos llevaron a que el político socialista del Marítimo Joan Lerma resultara reelegido president de la Generalitat Valenciana, y Antonio García Miralles, presidente de las Cortes Valencianas. El PSOE volvió a ganar en los principales ayuntamientos, si bien sufrieron una gran pérdida de votos.
En Valencia ciudad fue tal que perdieron la mayoría absoluta y pasaron de 18 concejales a 13.La sorpresa la protagonizó el partido regionalista Unión Valenciana, que de un solo edil pasó a siete y a ser la segunda fuerza más votada en la capital del cap i casal. Alianza Popular consiguió otros siete concejales, el Centro Democrático y Social cuatro ediles e Izquierda Unida dos. Manuel Fraga dimitió como presidente de AP y le sucedió un joven Antonio Hernández Mancha, quien se estreno en la batalla política nacional con una moción de censura contra el Gobierno. Ese año los españoles fuimos al cine a ver "El último emperador", "Dirty dancing" y "Los intocables de Eliot Ness".

En nuestra ciudad el Pregón anunciador lo pronunció don Baltasar Bueno Tárrega, entonces periodista del diario LAS PROVINCIAS, y que firmaba con el pseudónimo de Parménides al finalizar el mismo el Consejo de Gobierno cenaba con el Pregonero en Casa Balaguer en la Avenida Constitución; la Concejalia de Fiestas y Turismo de nuestro Ayuntamiento la seguía rigiendo Enrique Real Martínez y también continuaban de Presidente y Secretario General de la Junta Mayor Ramón Guardino y Pepe Vilaseca. Nuestro Alcalde Ricard Pérez Casado inauguraba mientras tanto el Palau de la Música y el tramo Bofill del Jardín del Turia. Estaba construyéndose en Burjasot las instalaciones del centro de producción de RTVV. A su vez, la plaza del País Valenciano pasó a llamarse Plaza del Ayuntamiento.
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