HISTORICOS CABOS DE GASTADORES DE NUESTRA SEMANA SANTA MARINERA DE VALENCIA

EOS en este caluroso agosto sigue al pie de cañon en su labor de difusión de nuestra fiesta.La Semana Santa Marinera de Valencia mantiene tradiciones que atestiguan su origen marinero, las cuales la singularizan respecto al resto de las que se celebran en España y una de ellas es la de la persona que encabeza los desfiles procesionales en cada hermandad, cofradia, o corporación llamado CABO GASTADOR o cabo de gastadores en clara referencia a lo militar, tambien nuestras bandas tradicionalmente han tocado marchas militares y de ahí nuestra costumbre a lo largo de la historia a marcar el paso y de ahí "el redoble con la izquierda”, se nos insistía constantemente a los que de pequeños nos iniciamos en las procesiones.

Muchos son los nombres que cada cual recuerda en los distintos colectivos a lo largo de la historia pero como muestra traemos algunos de ellos, unos aún entre nosotros aunque retirados y otros disfrutando de la Gloria de Dios Padre. El tio Paco Zaragozá encabezó muchísimos años la Corporación de Sayones de San Rafael, era el iniciador del Santo Entierro tras la guardia a caballo de la Policia Local de Gala. Su paso marcial lo distinguia en cada procesión.

Manuel Miguel Senent, ha encabezado los desfiles de la Hermandad del Santo Sepulcro del Cañamelar también una barbaridad de años y ha sido presidente de la misma. Si Paco Zaragozá iniciaba el Santo Entierro, Manolo "El Corto" con sus más de dos metros de altura era todo un icono de la Hermandad que cerraba el mismo. Hoy con una pierna ortopédica aún ha salido algún corto trayecto procesional.Jaime Portalés Juan, operador de cine y emblematico pretoriano que encabezó y presidió dicha Corporación. Era conocido por el "tio Jaume" y con su sonora voz decia aquello de "Yo volia proposar...señores de la KGB".

Fue presidente del Comite de Competición de los campeonatos de futbol-sala de la Junta Mayor y en sus últimos años amén de granota hasta la m´dula regentaba una papeleria en la calle Mijares, hoy desde el cielo seguro que sigue velando por sus Pretorianos y Penitentes junto a Guillermo Rodriguez Miravet.

Francisco Celdrán Montero encabezó durante 40 años de los más de 50 que perteneció a la Hermandad de Vestas del Santísimo Cristo del Buen Acierto la formación de dicha Hermandad como antes hicieran Flor, Cervera y otros cabos de gastadores. Primero desde la calle de la Barraca donde Luis Sorolla concentraba a los suyos o desde la Dinamica en la calle José Benlliure, la Bodega Gimeno en Padre Luis Navarro, en época de Vicente Pérez González o en la calle Progreso 66 donde estuvo el local social de la Hermandad.

Paco Celdrán fue presidente y hermano mayor de las Vestas del Stmo. Cristo del Buen Acierto, amén de presidir la parroquial del Cañamelar. Con su fuerte carácter y personalidad era odiado por unos y admirado por otros pero imprimia su sello personal y marcialidad policial en los desfiles procesionales.

Su forma de expresarse sin pelos en la lengua le trajo más de un quebradero de cabeza, pero siempre se mantuvo fiel a su estilo y a su forma de entender la Semana Santa Marinera.

Vicente Belenguer "El lletero" que este mismo junio ha partido hacia la casa de Dios Padre para reunirse con otros semanasanteros encabezó los desfiles de los Granaderos del Cabañal. Fue presidente de dicha Corporación y durante muchos años junto a Ramón Ramirez, Salva Caurin y otros muchos granaderos dieron lustre a "los chulos" -dicho sea de manera cariñosa- soldados napoleónicos del Cabañal.

Cada Viernes Santo con el rostro cubierto recorrió las calles y plazas del antiguo Pueblo Nuevo del Mar.

Miguel Gallart ha sido santo y seña de la Corporación armada de Longinos. Los famosos "ronquinos" por deformación del lenguaje. Este vendedor de pescado en mercado, o empresario del comercio de frutos del mar que dirian algunos hoy ha vivido la fiesta grande del Cabañal encabezando a los soldados romanos.

Con los trajes rojos, azules y megros de antaño y con los blancos para los dias actuales de gloria Miguel y su hijo Salva han sentido la relación de amor-odio que a veces trae el entramado de relaciones humanas en torno a una fiesta. Su amor por Jesús Nazareno ha sido crucial en su vida y los Longinos que ha presidido forman parte de la historia de su existencia.

Desde EOS nuestro sincero homenaje a estas gentes, y a todos los que encabezaron, encabezan y encabezarán nuestras cofradias, hermandades y corporaciones por ser una tradición muy nuestra.