FOTOS RAFA MONTESINOS Y ARCHIVO
FCM.- Juanito Huelamo me contaba el otro día la especial admiración que siente por Enrique Juan Gil, más conocido en el Cabañal como ENRIQUITO EL SACRISTÁN.
Uno de los mejores ministerios o servicios que el
laico puede prestar a la comunidad es el de sacristán.Él ayuda a que la
celebración se desarrolle bien, fluidamente y que todos puedan participar mejor en ella.Al sacristán
no le encargan que lea, o que cante, como al solista; o que diga moniciones,
como al comentador.Aunque a veces también tiene que asumir algunos de estos
servicios.Pero indirectamente sí influye, y mucho, en la celebración, porque
prepara todo y pone la infraestructura necesaria para que la comunidad pueda celebrar
en las mejores condiciones posibles.
Los sacristanes de las parroquias, de las
comunidades religiosas son personas que
a veces trabajan abnegadamente horas y horas para tener en orden la iglesia y la sacristía, para preparar los
libros, las flores y la megafonía y las luces...
No aparecen mucho, pero tienen mérito. Ayudan a la comunidad nada menos que a
esto: que pueda celebrar bien.
Son muchas las cosas que se le piden a un
sacristán:Que mantenga en orden,que abra y cierre oportunamente las puestas de la Iglesia; limpieza y buen estado
los locales de la iglesia, de la sacristía y de los objetos de culto: vestidos,
libros, utensilios;que prepare en su aspecto material las celebraciones: que
ponga a punto los libros que van a hacer falta, los ornamentos del ministro
según el color del día, las luces, el pan y el vino para la misa, la megafonía;que
vaya tocando las campanas según sus diversas llamadas; que organice la colecta
del ofertorio de modo que sea rápida, y termine antes del prefacio;etc.
Pues todo eso hace Enriquito en Los Angeles, decía Juanito
e incluso me entregó una foto suya a color, que reproducimos en blanco y negro, de cuando hace unos años encarnó al Rey Baltasar.
Con el párroco dentro
y fuera del templo tiene una especial complicidad
y la adoración Eucarística es algo que vive intensamente
Semanasantero del ECCE-HOMO, compagina su labor
y disfruta, cuando puede de la buena gastronomía
participa en nuestros desfiles y procesiones
En definitiva y como nos contaba Juanito, una buena persona, que busca el bien: "ENRIQUE JUAN GIL" CABAÑALERO, PORTUARIO, COFRADE Y SOBRE TODO SACRISTÁN DE LA PARROQUIA DE NUESTRA SEÑORA DE LOS ANGELES.
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