
Cuatro
partidos y medio después, nuestro Levante UD cantó gol. Fue un buen
tanto de Rubén García, eso sí, y valió tres puntos de oro que alejan
fantasmas y aportan mucha tranquilidad. Y fue ante Caparrós y con su
receta. Oficio, orden y sacrificio máximo. Así se labró el equipo de Mendilibar
su primera victoria de la temporada.





QUE GRANDE ES SER PEQUEÑO Y ESTAR AHI CON ILUSION, HUMILDAD, TRABAJO Y PACIENCIA. ¡MACHO LEVANTE!
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